En países como Estados Unidos, los concursos de belleza infantiles son populares pero también son objeto de cuestionamiento ya que se consideran una forma de abuso y explotación de niñas maquilladas y mostrando actitudes que son más bien compatibles no con la infancia, sino con la adultez, algo que puede traer serias consecuencias.
En República Dominicana no se está lejos de esta realidad.
Conversamos con especialistas para analizar cuáles son los riesgos y las consecuencias de estos certámenes.
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